Es tiempo de cerezas en este lado del mundo, de noches de fantasía y de memoria. De gatas maullando en los tejados escondidos entre las sombras de tres rayos de luna.
Un violín dormido se despierta Y toca una sonata en fa sostenido menor Y entrelazando su cuerda y su sonido Tejen el único ser que somos
Je se me ourre: Son tus labios dos cerezas rojas. je.
ResponderEliminarbesos y amor
je
A mi se me ocurre Tiempo de cerezas.
ResponderEliminarMe has dado una buena idea.
Gracias amiga.